domingo, 25 de abril de 2010

Fin Du Monde


Un Resaltante infierno se esconde entre mis manos, lo veo con mis ojos, y lo hablo con mi boca
Aamon me dice, ayudante de Astaroth, la raza condenada al egoísmo.
La raza impura desde su creación, por el dedo divino al cual le llama su dios.
Cuando me concentro, soy un poeta guerrero, escondido en lo más oscuro del mundo.

No subestimen el poder de mi percepción, puede ir mas allá de lo imaginado,
Cada palpitación mía, late más fuerte, haciéndome mas joven, mas divino,
Soy el rey del fin del mundo....
Cuarenta legiones de demonios bajo mi mando, ostentando el título de príncipe.

Mi mente no recuerda, la compasión, el perdón, ni el amor,
Todo pasó hace tiempo, que ese amigo mío, se a encargado de borrar todo recuerdo,
Me ah echo de piedra y me cubrió de mármol
Congelándome en un caparazón incorruptible a las suplicas del ser inferior.

Puedo ver tres hermanos peleando, tres hermanos destruyendo y creando,
Tres hermanos destetados.
Cuidado conmigo, por que lastimo mucho los ojos....
En esta locura asesina, que me gusta, no puedo negarlo,
Reemplazo la amistad con traición, la piedad con tiranía, la humildad con vanidad,
Reemplazo el hambre con gula, el amor con odio, mi humanidad con un animal...

Nunca trates de salvar a quien no quiere ser salvado, en mi reinado él es feliz,
Yo cubriré a mis hijos con mis brazos, para darle un calor siniestro, y los guiare con mis manos para que no crean en el mundo ciego,
Aamon me dice, el conocedor del pasado y el futuro.
Dejando a oscuras la ilusión del ser humano, que bajo la tempestad sigue buscando.

En mi corazón laten los antiguos pesados, los más duros, los más fuertes,
Soy de fierro.
Y hago al sol invisible a la luna.
Siempre abandona, nunca dejes que alguien te abandone, siempre clava el puñal antes de tiempo,
La crueldad siempre esta primero, para sobrevivir, es necesaria.

Escucha lo que te susurro al oído Gabriel, es la verdad y con esta has de seguir,
Por el resto de tus días, hoy yo te maldigo, solo para tu protección,
Para conservar tu alma, y que de tu boca nunca salga, que yo no te amo, mi hijo divino,
Que vive en la tierra desprotegido, siendo castigado por el....
Al que todos le llaman su dios.