Salvando Nuestra Luz

Que nadie acá sienta, que no merece vivir mas que yo

Y aquel que piense que todo esta pedido

Que recuerde hoy; yo vengo a ofrecer mi corazón.

(Golpeando su pie contra el suelo, con todo el sentimiento de Alecto)

Los ojos hablan fuego

Y me voy con el placer de saber que la vida no fue lo suficientemente difícil.

Extenderé mis alas de plata, sobre todo el horror;

Como un águila que abre sus alas y se lanza contra su presa

El lo hace contra el miedo y el fin

Una luz amarilla tan fuerte como el sol, se postra detrás de él

Alumbrando su figura, para que sus enemigos no lo puedan ver.

Su corazón es el mas inmenso, imposible de dominar

Y que sepa aquel que nunca vio nada, que el nunca retrocedió

Aunque como todo ser humano duda;

Con duda y todo él se lanzo.

Que su rostro, por los años de leyenda viva que pasan de boca en boca, se borre,

Nunca matara al campeón que ese día todo lo dio

Ese día que el rayo se incrusto en su pecho, con toda elegancia mística

Y como en stop-motion, vi con mis pupilas cristalizadas, la apertura de sus brazos,

Con sus ojos hacia arriba, predispuesto con su corazón

Gritando!: "Yo soy la luz de toda oscuridad"

Esas fueron su ultima palabra, que con cuerpo el mostró.

Recuerdo ese último instante, podría jurar que lo vi en paz,

Creo que en el fondo tenia en cuenta que la muerte no significaba nada

Simplemente era una definición de algo que no conocemos

Y si alguien merecía el olimpo, ¿quien mas, que nuestro ultimo gladiador?....